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jueves, 1 de septiembre de 2016

el carnet de conducir mas calentamientos de cabeza

Yo como cualquier chaval que cumplía dieciocho años, una de las cosas que más ilusión me hacía era sacarme el carnet de conducir, ya que eso haría que tuviera total independencia y menos frio por la calle en invierno dicho sea de paso ya que iba en quad y en invierno como cualquier ciclomotor si hace frio tienes frio , pero claro al tener discapacidad el tema no es tan sencillo, primero tuve que pasar por tráfico un examen médico que para mi sorpresa se componía de mirar en una lista que si tenía espina bífida, tenía que ser un coche automático y acelerador y freno en las manos, lo cual deja al descubierto lo mal que está el tema de medir a todas las personas con espina bífida con la misma regleta .


Una vez conseguido un dictamen coherente y con pruebas médicas realizadas, parecía que todo se encauzaba pero no, resulta que no todas las autoescuelas tienes todo tipo de coches y en algunas autoescuelas de mi zona la solución que me daban era:” cómprate tú el coche adáptalo ponle pedales en el copiloto y así te damos las clases”

Conseguí encontrar la autoescuela más cercana que tenía coche automático como a unos 20km de mi ciudad de residencia, con suerte disponía de un quad (moto de cuatro ruedas) y todos los días me hacia esos kilómetros y me quedaba mañana y tarde para aprovechar el tiempo y sacármelo lo antes posible.

Me lo saque realmente rápido el teórico y el práctico más o menos en la media de aquel momento
El practico empezó con más pegas e inconvenientes, las practicas las tenía que hacer en Murcia capital ya que el coche automático estaba en la sede central de la autoescuela, que se encontraba en Murcia capital, durante el tiempo que duraron las practicas tuve que ir en tren día sí y  día también, y desde la estación de tren empezaba la práctica y luego me volvían a dejar en la estación para que me volviera a casa.

La verdad que en el aquellos momentos estaba muy perdido y desconcertado y  tengo que dar las gracias a toda mi familia que me apoyo, y por supuesto a la asociación que me recondujo para buscar todo el tema de autoescuelas, ayudas, todo lo que necesite en todo momento.


Mi consejo es que con el tema del carnet se informéis bien busquéis ayudas o subvenciones que en ocasiones salen ofertas muy buenas no vayáis con prisas, y si no os convence el dictamen médico pedir una segunda opinión, tenéis todo el derecho. 

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