Una vez terminado la titulación de auxiliar de enfermería tocaba
sumergirme en el mercado laboral, y ya que mis últimas prácticas las hice en una
residencia de ancianos donde sabía que siempre necesitaban personas para trabajar,
decidí echar el curriculum sin muchas esperanzas ya que en mi paso por la
residencia tuve momentos de todo tipo.
Me llamaron al poco
tiempo y empecé con mucha ilusión y muchos nervios. Pronto descubrí el porqué,
de que necesitaran mucha gente, y lo que duele la espalda trabajando en una
residencia y teniendo espina bífida con más motivo.